Asi fue que en los ultimos años asistimos casi forzados a la puesta en marcha de una gran cantidad de sistemas de riego mecanizado accionados fundamentalmente por grupos de fuerza diesel.Una decision que no era tan dificil de tomar sobre todo pensando que estos sistemas se diseñaron para ser accionados por energia electrica en algun momento del mediano a largo plazo y sobre todo debido a que la diferencia en el costo del mm era absorbido por un buen margen en la produccion fruto de la bonanza economica reinante hasta mediados de 2008.
Lamentablemente la falta de una planificacion estrategica que contemple los usos y aplicaciones de la energia electrica llevo al colapso del sistema y en definitiva aquellas inversiones previstas a mediano plazo que buscaban reemplazar el bombeo diesel por electrico , debieron ser postergadas.
Si a la falta de inversion del sector energetico le sumamos la crisis internacional mas la propia de Argentina generada por un gobierno miope y carente de una vision de largo plazo ,tenemos hoy que vastos sectores de nuestro pais que podrian mejorar sus costos y otros nuevos a desarrollar deben desestimar inversiones en el rubro agricola.
Si bien el final de los subsidios a las tarifas es una medida necesaria como lo es el sinceramiento de la economia real , su falta de oportunidad se presenta como un agravamiento importante para el sector productivo en general y para el campo en particular.
Es de esperar que 2009 llegue a su fin con un incremento superior al 40% en las tarifas electricas vigentes a fines de 2008 y esto sin tener en cuenta que esto no se traducira en mas y mejor energia sino por el contrario el servicio seguira con las graves carencias y deficiencias actuales.
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